Casi a la par de la ola de fascinaciones por la intuición de que Internet abriría un ventanal hacia profundidades del orden de lo ilimitado, una avalancha de fenómenos de desarticulación de toda una serie de prácticas establecidas elevó sospechas acerca de la inestabilidad de la supervivencia de los cánones en tiempos y espacios de la red.
Si, por un lado, se presenta la inmensidad de posibilidades de navegación como canales viables para la exploración y el enriquecimiento de los trabajos escolares, por otro lado se registra la desconfianza suscitada por el -ya clásico- “copy-paste”.
Las tendencias a la extracción de fragmentos y su inclusión en los escritos “propios” sin el citado exhaustivo de las fuentes (junto al decrecimiento de los esfuerzos por elaborar material creativo) constituyen una de las preocupaciones primordiales a la hora de considerar la evaluación de las “producciones de los alumnos”. Este fenómeno de apariencia bastante compleja, en el que intervienen múltiples factores, ha llevado a que investigadores y especialistas en sistemas de información y programas para la web intentaran diseñar una solución a la medida del docente.
La última novedad se llama “Approbo” y consiste en un programa gratuito y español para comprobar si los estudiantes (y, por qué no también, los profesores) copian -sin escrúpulos- de Internet. Approbo se suma a una lista de tecnologías con fines semejantes, como Compilatio, Turnitin, CopyScape o Antiplagio Educared..Considerado como un antídoto efectivo contra copiones, la invención a cargo del equipo liderado por Josep Lluís Mancho busca evitar la propagación del “fenómeno del 'copiar y pegar', íntegra o parcialmente, contenidos de Internet y presentarlos como obras originales y, en algunos casos, hasta cobrar por ello” [1].
El criterio, básicamente, sostiene que, así como la tecnología permite la apropiación descarada de los textos de la web, ella misma debe garantizar la evasión del plagio. Approbo, en este sentido, se posiciona como una “utilidad gratuita, sencilla e intuitiva” para comprobar si el documento es una copia. “Muchos maestros están hartos de sospechar que sus alumnos fusilan contenidos. Ahora tendrán la certeza de que es cierto”, asegura Mancho.
¿Quiénes son sus destinatarios?
Según la descripción del mismo sitio oficial de Approbo, se trata de una herramienta útil para cualquier usuario y organización e institución que necesite comparar documentos:
Profesores
Escuelas
Estudiantes
Universidades
Periodistas
Editoriales
Escritores y editores
Agencias de medios
Bloggers
Publicaciones periódicas
Approbo se constituye, de esta manera, como un comparador de documentos online de acceso gratuito, que permite comparar el archivo deseado con aquellos coincidentes que se encuentren en la web, indicando además el grado de similitud entre el original a comparar y los distintos resultados.
¿Cómo funciona el detector de plagio?
Difícil obstáculo para quienes gusten de la comodidad del copiado automático, “Approbo es una aplicación online multiplataforma (Windows, Mac, Linux) que automatiza los procesos para saber qué partes de un texto son originales o no. La comparación se realiza en cualquier formato textual y su funcionamiento es sencillo. Basta con subir el archivo a Approbo. En minutos (según la velocidad de conexión) el programa, que funciona desde cualquier navegador de Internet, da su veredicto: si la copia es íntegra o parcial, y de qué fuentes proviene. La búsqueda de documentos se hace en Google, es decir, compara con los millones de webs que indexa el buscador” [2].
Además de rastrear documentos ajenos, el programa está configurado para hacer el seguimiento de los propios, ya que, como explica José Luis Mancho, el autor “puede comprobar el grado de difusión de su obra en la Red o saber en qué webs o blogs aparecen las mismas frases sin su permiso”.
Para empezar a utilizar la aplicación, se requiere ingresar al sitio web de Approbo y seguir tres pasos sencillos: primero, registrarse (el espacio funciona de modo gratuito y garantiza confidencialidad); segundo, elegir el documento que se desea comparar; y por último, comprobar el resultado obtenido.
Otros programas con fines similares
Los siguientes nombres de aplicaciones forman parte del conjunto de herramientas que Internet facilita para la detección de plagios y apropiaciones ilegítimas:
Turnitin
Compilatio
CopyScape
Fair Share
Referencias:
[1] Extraído de: http://www.elpais.com/articulo/portada/Antidoto/copiones/elpeputec/20090528elpcibpor_1/Tes
[2] Idem [1].
Imagen móvil del copete: ©2006-2009 http://conuyaku.deviantart.com/art/copy-and-paste-33096555
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